Ana Millán, directora de la Fundación Accenture

Ana Millán es la directora de la Fundación Accenture. Tras realizar acciones de consultoría para la compañía se incorpora a la Fundación para implantar estrategias concretas de acción social que ofrecen al tercer sector aquello que mejor saben hacer, la consultoría, y de forma desinteresada. En diez años de andadura se han donado más de 650.000 horas de consultoría en la realización de más de 400 proyectos por unos 1.500 consultores.

¿A grandes rasgos, en qué ámbitos está colaborando la Fundación Accenture con las entidades sociales?

Desde Fundacion Accenture canalizamos la acción social del Grupo Accenture, dando respuesta a las inquietudes de sus empleados con tres líneas de acción distintas y complementarias, la consultoría gratuita, la financiación de proyectos sociales y el voluntariado corporativo.

Con la consultoría gratuita ofrecemos a las organizaciones de carácter social lo que mejor sabemos hacer y más valor porque pensamos que es la mejor forma que tenemos de contribuir a la transformación y modernización del sector social.

También nuestros profesionales colaboran con proyectos sociales a través del programa de redondeo de nómina, hacen donaciones puntuales para emergencias (en ambos casos la Fundación aporta un importe idéntico al recaudado) y participan en programas de voluntariado corporativo.

En materia de inserción laboral, ¿en qué grado crees que se sienten las empresas comprometidas como responsables de contribuir a la igualdad de oportunidades en el empleo?

Hablando del caso que conozco en profundidad, Accenture es un claro ejemplo de la sensibilización empresarial con la igualdad de oportunidades a la que contribuimos principalmente con dos enfoques. A través de la focalización de nuestra acción social en el fortalecimiento a través de la consultoría, las donaciones y el voluntariado de los programas de empleo de las principales organizaciones sociales españolas que trabajan por la integración laboral de colectivos vulnerables. Y otro con la apertura de oportunidades formativas, de trabajo en prácticas y de inserción laboral del Grupo Accenture a las personas más vulnerables.

Sé que hay otras empresas que como nosotros están muy comprometidas y creo que a este compromiso se irán sumando cada vez más empresas conforme más conscientes vayan siendo de la destrucción y falta de generación de empleo que la crisis está trayendo para las personas con mayor vulnerabilidad. En esta toma de consciencia del sector empresarial las organizaciones sociales tenéis un papel muy importante que desempeñar.

Trabajáis de la mano de la administración y el tercer sector con el programa ‘Juntos por el empleo de los más vulnerables’ para detectar posibles vías de acción. Cuéntanos de qué se trata.

Se trata de una iniciativa de impacto colectivo, sector social, privado y publico, en la que colectivamente diagnosticamos los principales obstáculos e identificamos las principales iniciativas a apoyar conjuntamente para lograr dar un paso significativo en el empleo/autoempleo de los más vulnerables.

En la primera jornada de trabajo identificamos 4 frentes principales de acción: formar en las necesidades reales del puesto de trabajo, terminar de formarse trabajando, facilitar la intermediación laboral y fortalecer el ecosistema de emprendimiento para el empleo o autoempleo de los más vulnerables. A la iniciativa se han adherido 80 entidades muy representativas de los 3 sectores.

En la actualidad estamos ya trabajando en identificar proyectos concretos a realizar conjuntamente para cada una de las líneas anteriores. Accenture aportará su consultoría gratuita para tirar de cada uno de los proyectos que se identifiquen en conjunto con el resto de organizaciones.

Los patrocinadores de estas jornadas además de Accenture son Fundación Compromiso y Transparencia y Fundacion Seres.

En ocasiones no es fácil valorar el nivel de empleabilidad de una persona en dificultad social. Sabemos que estáis desarrollando un Modelo de Empleabilidad que pueda establecer los principales criterios orientativos, ¿en qué consiste?

Efectivamente no sólo no es fácil valorar el nivel de empleabilidad de una persona sino tampoco contar con una metodología, plan de formación y materiales formativos que ayudarían a la persona a desarrollar las competencias transversales que necesitaría para desempeñar con éxito un determinado puesto de trabajo. Y ya el gran reto es que de cara a compartir recursos entre entidades sociales y a la formación e intermediación laboral que se realiza con la empresa se produzca profundo entendimiento porque todos hablamos el mismo idioma. Este Modelo de Empleabilidad, materiales metodológico, simuladores para la medición, herramientas informáticas para la gestión y la formación on-line y cursos e-learning es precisamente lo que estamos desarrollando de forma gratuita con la colaboración de Cruz Roja Española, Caritas Española, Fundacion ONCE, FSC Inserta, Secretariado Gitano, Fundacion Tomillo y Fundacion Exit.

Este Modelo de Empleabilidad es uno de los proyectos que componen la línea de actuación colectiva de “formación en las necesidades reales del puesto de trabajo” para la que contamos además con la adhesión de fundaciones empresariales y empresas, entre ellas Accenture por supuesto, que proveerán la descripción competencial de los puestos de trabajo de sus empresas a los que podrían optar personas con mayor vulnerabilidad.

Esperamos además que siendo capaces de medir de forma muy objetiva el progreso que una persona va haciendo en adquisición de competencias transversales pongamos en valor el magnifico trabajo que el sector social realiza en mejorar la empleabilidad de los colectivos a los que atiende como paso previo a la consecución y retención del empleo.

¿Cuál es tu visión de futuro respecto a la colaboración entre las empresas y el tercer sector en materia de inserción laboral?

Las empresas buscan talento y personas que valoren las oportunidades laborales que se les ofrecen. No todo el talento que se busca requiere unos estudios superiores y no todas las personas valoran igualmente las oportunidades de desarrollo vital que ofrece un empleo. Los colectivos con más vulnerabilidad en estos dos factores, como mínimo, tienen una gran oportunidad. El reto es ofrecer a la empresa personas excelentemente formadas en lo que exactamente la empresa necesita. Para eso el sector social, empresarial y público deben trabajar conjuntamente para ofrecer a las personas comprometidas con su desarrollo profesional las oportunidades educativas justas para facilitar su inserción laboral. La persona logrará su independencia económica y la empresa sabrá apreciar las aportaciones diferenciales que las personas con vulnerabilidad introducirán en su realidad.