Cuestiones que preocupan al empresariado para contratar a personas inmigrantes
Con frecuencia, cuando se habla de gestión de la diversidad cultural, en muchas empresas, sobre todo en las que cuentan con plantillas reducidas, se escuchan argumentos que ponen el acento en las posibles dificultades y problemas que pueden derivarse del hecho de contar con personal de otras culturas o procedencias, o que están construidos en base a estereotipos y prejuicios hacia determinados grupos.
“Y si a mis clientes no les gusta que les atienda una persona de otro grupo étnico”.
Efectivamente, puede que a algunos clientes, esto no les guste. Pero es posible haya otros muchos que lo vean como algo positivo, incluso habrá algunos para quienes esto resulte algo atractivo.
¿Porqué no preguntárselo?
“La religión musulmana dificulta la adaptación de los trabajadores y trabajadores en la empresa”.
Puede que haya algún caso, pero con la religión musulmana ocurre lo mismo que con otras religiones: hay personas que son practicantes, otras que no, algunas que practican su religión en público, otras que sólo lo hacen en privado…
“En el Ramadán puede bajar la productividad”.
No hay estudios que demuestren esta creencia. Y en todo caso las personas que practican el Ramadán, están habituadas a hacerlo sin que se altere su vida cotidiana. Por otro lado, se puede establecer una política que permita disfrutar de algunos días libres fuera de los periodos de vacaciones más habituales.
“Qué pasa cuando alguna persona necesita tiempo para rezar?”.
El tiempo para la oración puede salir dividiendo el horario de comida, en periodos más cortos de tiempos.
“La mayoría de trabajadores y trabajadoras de otros países tienen estudios que no sirven aquí”.
De nuevo no se puede generalizar. Muchas personas que han llegado a nuestro país en busca de trabajo, tienen una titulación académica. Es probable que estas personas conozcan otras técnicas, otras herramientas aplicables a la realidad de la empresa.
“Hay países donde la gente se toma la vida con demasiada calma”.
La paciencia, la capacidad de observación, el saber esperar son competencias necesarias para muchas ocupaciones. Es cuestión de gestionar adecuadamente los recursos humanos y buscar la mejor persona para el mejor perfil.
“Contratar a personas de diferentes países puede generar conflictos entre ellas”.
No existe una regla fija que muestre que a mayor diversidad, surjan más conflictos. En cualquier caso, el conflicto es inherente a las relaciones humanas fuera y dentro del mercado laboral. Con una gestión adecuada, un conflicto puede ser la oportunidad para que un equipo de trabajo crezca y se fortalezca. Y conviene tener en cuenta que en muchas ocasiones, estos conflictos se reducen o aminoran si la diversidad también está presente en los niveles intermedios de la empresa (personas con responsabilidades de coordinación, supervisión, capataces…).