Dos casos de éxito: Carmen Araceli y Pathé Cissé
Carmen Araceli estudió Fisioterapia en Bolivia, su país, y en 2003 decidió marcharse de allí para encontrarse con su madre y su hermana en Cádiz y así continuar su proyecto personal y profesional en familia.
Para ella, su oportunidad ha sido la formación. Gracias a los cursos recibidos en el centro “Tierra de todos” de Cádiz y en los Servicios Integrados de Empleo de Cruz Roja, ha podido acceder al mercado laboral como auxiliar de ayuda a domicilio, una actividad con la que se siente realizada y satisfecha “porque me gusta el sector de la sanidad y, sobre todo, ayudar a otras personas”.
La inquietud de Carmen por aprender la ha llevado a ampliar su formación en otros sectores -marketing y ventas- que compagina con su trabajo actual.
En un futuro quiere homologar su titulación y seguir formándose como fisioterapeuta “para ejercer el puesto”. Su intención es quedarse en Andalucía: “me ha costado mucho esfuerzo y dedicación llegar a lo que soy ahora, pero he obtenido mi recompensa”.
Para Pathé Cissé su oportunidad vino a través del bolígrafo y los folios que le proporcionaron en Cruz Roja.
Había llegado a Tenerife a bordo de un cayuco y un día sintió la necesidad de expresar por escrito las experiencias vividas en todo ese tiempo; así surgió La tierra prometida. Diario de un inmigrante, su primer libro.
Senegal, su país; el océano Atlántico; las playas de Tenerife; Las Palmas y, finalmente, Cádiz, donde reside en la actualidad, inspiraron un relato editado por la Diputación de Cádiz cuyo significado, a día de hoy, ha trascendido más allá de sus páginas.
Ocasionalmente, combina su labor como voluntario en Cruz Roja, con charlas y conferencias en colegios, institutos, universidades y otros centros públicos, a los cuales acude en calidad de escritor. En un futuro le gustaría trabajar para Cruz Roja.